
La vida continua para Gutierrez, aun arriba de su monopatin se las arregla para lavarse los dientes, leer el diario, guiñarle el ojo a las chicas que se asemejan a Nora Carpena y Lola Cordero, tomar té levantando el dedo meñique correspondiente a la mano que sostiene la taza y disimuladamente tirarle una patadita a las palomas que están a su alcance.
Al sentir su cuerpo ligeramente en libertad por la velocidad del monopatin surcando las calles (únicamente se ve condicionado por semáforos y peatones), su mente también comienza a liberarse y a pensar en toda clase de estupideces, como por ejemplo:
-Que pasaría si un elefante se parara sobre su automovil.
-Que pasaría si un día nadie en el mundo recibe sus emails.
-Si estuviera hambriento se comería una rata, sin dudarlo. -Increíblemente recordó como hacer merengue.
-Si llega a encontrar un huevo de dinosaurio en perfecto estado, también se lo comería.
-Si se encuentra con él mismo a la vuelta de la esquina, juraría no conocerlo.
-Y si cierra la boca al pensar no tragaría toda clase de insectos y/o pequeños pajaritos.
Así que cerro su boca, se subió el cierre del pantalón (lo tenia abierto hace unos kilómetros) y siguió su camino hacia lugares desconocidos ...al menos para él.
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