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Ahí va Gutierrez caminando por ese lugarcito de la vereda donde la luz no llega.

Y tiene mil secretos escondidos o mejor dicho, olvidados.

Como cuando se dedico por completo al cine, o como odiaba decir: "Séptimo arte", por que no quería pasar por intelectual ni mucho menos.
En primer lugar, y por falta de ideas, pensó en escribir su biografía, llena de suspenso y misterios...debido a las increíbles lagunas mentales de Gutierrez y a su capacidad de memorizar las cosas por un máximo de tres horas.
Y así sucedió, paso 7 años escribiéndola, lo que hizo que los últimos tres capítulos sean un tanto aburridos ya que en ellos solo relataba lo que escribía día y noche en su biografía.
Una vez terminada, se dio cuenta que le faltaba el titulo de la obra, que sea atrapante, cautivante, pegajoso. Y al escribirlo se dio cuenta que su verdadero talento no era la escritura de la obra en sí, sino...los títulos.
Y tiro toda su obra a la basura (13 paginas) y solo exhibió el titulo de la obra.

Y la gente acudía de todas partes del mundo para ver en cartelera ese maravilloso titulo.
Y compraba la tapa dura del libro que no contenía ni siquiera un prologo para tener ese titulo entre sus obras más codiciadas. Justo entre "Dailan Kifki" y "El color que cayo del espacio"
Y los más prestigiosos cines del mundo se peleaban por ser los primeros en proyectar ese titulo en pantalla...

Y ese fue solo el comienzo de una larga y fructífera carrera de una especie de cineasta breve, que se ajusto perfectamente a estos tiempos en que la gente no tiene mucho más tiempo para perder, por que al parecer ya lo perdió todo y siempre anda apurada.

Menos Gutierrez que es medio lento para todo. O casi todo.